Sonrisa perfecta en 4 pasos
Los labios, son unos de los puntos más atractivos del rostro, protagonizan la expresión, su movimiento armónico atrae con cada palabra pronunciada, permitiendo establecer contacto directo con otra persona. Por esta razón requiere un importante cuidado especial y dedicado.
La piel de esta zona es mucho más delicada y sensible que la del rostro, debido a que no contiene glándulas sebáceas que le proporcionen lípidos y solo se protege mediante una capa fina llamada cornea, por ello la importancia de un cuidado intensivo.
Limpiar es indispensable para eliminar la cantidad de residuos de suciedad que se adhieren a los labios, muchos productos desmaquillantes de ojos también lo son para los labios. Continúa con una exfoliación que limpiará de células muertas la zona, te recomiendo hacerlo luego de la ducha.
Un punto importante es la hidratación, y será de acuerdo a las necesidades individuales de tu boca, debes hacerlo al menos dos veces por semana, finalmente protege tus labios con productos especiales de las agresiones externas como la brisa, el viento, el sol que estropean esta delicada piel
Consejos básicos
Evita el tabaco y el alcohol, humedecer los labios con saliva, gesticular en exceso, residuos de pasta dental y enjuagues bucales, pues son dañinos para los labios, así como también los labiales de larga duración.
El color de la barra de labios debe armonizar con el tono de tu rostro y la vestimenta. Si posees dientes amarillos utiliza rojos brillantes, pues los harán más blancos, por último, si eres morena opta por tonos fríos y si tu piel es rubia pues acepta los tonos claros.
Consume Vitamina A, presente en hígados, pescado, yemas de huevo, mantequilla y quesos, así como en el melón, la zanahoria, el mango y las espinacas; y Vitamina E, presente en las ciruelas, plátanos, manzanas y espárragos.
RN
