Las características de cada color de piel (Parte II)
En el artículo anterior te comentamos cuáles son las características específicas, en tanto beneficios y problemas más comunes de las pieles oscuras y blancas. Hoy te traemos la información acerca de las pieles morenas y asiáticas para que puedas prevenir los inconvenientes más comunes que afectan a estas pieles.
Pieles morenas
Estas pieles se encuentran en el medio entre las pieles negras y las blancas. Esto produce que tengan algunas características beneficiosas de cada una de ellas y lo mismo sucede con los problemas comunes.
Las pieles morenas no sueles ser tan propensas como las blancas a las arrugas, líneas de expresión, rotura de vasos sanguíneos y rosáceas. No obstante, tampoco son tan flexibles ni resistentes como las pieles más oscuras.
Los principales problemas a los que se exponen las pieles morenas se relacionan con la aparición de manchas y marcas luego de la cicatrización de úlceras cutáneas. Además, las pieles morenas más oscuras tampoco pueden exponerse a algunos tratamientos láser como, por ejemplo, aquellos que borran manchas o cicatrices.
Pieles asiáticas
Las pieles asiáticas u orientales son muy variadas ya que las tonalidades de color pueden ir desde el blanco porcelana hasta colores oscuros pasando por la gama de los tonos olivas. Estas pieles se caracterizan por ser muy suaves para el tacto, por lo que no se necesitan muchos tratamientos para mantener la piel tersa.
Los problemas principales a los que se enfrenta este tipo de piel se relacionan con la aparición de manchas y pecas debido, principalmente, a la exposición solar. Asimismo, estas pieles suelen irritarse con facilidad, por lo que se debe tener cuidado a la hora de comprar productos para la limpieza de cutis y tratamientos para el acné. La exposición a los productos irritantes puede traer severas consecuencias para la piel.
